Nubia, Compañera de Alma Viajera
Ella es Nubia Lopera, una de nuestra compañeras de la planta de impresos. Lleva 30 años trabajando en nuestra entidad y hoy, con orgullo; nos ha contado que, en abril o mayo próximo podrá aspirar a su pensión, a su anhelada pensión. Doña Nubia, es oriunda de Dagua, pero desde sus 14 años, bajó de la montaña al valle junto a su familia; a Jamundí.
Cuenta que llegó a la antigua Imprenta Departamental del Valle del Cauca, justo cuando pasaba por un momento de su vida en el que había crisis económica, fue una luz gracias a la gestión del entonces director, el Dr. Adolfo León Olivero; quien conocía de cerca su situación. Él, quien también es oriundo de la capital vallecaucana de la piña, le dio la oportunidad de trabajar en la entidad, inicialmente haciendo el trabajo de una compañera que estaba de licencia de maternidad, hizo bien su trabajo y con el paso de los meses, fue nombrada de planta.
Doña Nubia, siempre ha estado vinculada a tareas relacionadas de compaginación, nos contó que en aquel entonces los talonarios no llevaban papel químico sino papel carbón, era dispendioso para quienes lo manipulaban y además, eran de gran tamaño, en comparación con lo que hoy se produce en el mercado. También manejó la fotocopiadora del edificio de la gobernación, cuando esta estaba a cargo de nuestra entidad y hoy, continúa haciendo parte del equipo de terminados y de procesos de compaginación.
Tuvo la oportunidad de contarnos entre risas, la penosa experiencia por la que pasaron ella y sus compañeros cuando la entonces Imprenta entró en crisis, fue en el 2012 cuando hasta carpa tuvieron que instalar en la plazoleta de San Francisco, clamaban por el pago de sus salarios (más de tres meses sin sueldo) y apelaban a la solidaridad de la comunidad, quienes hacían donaciones de mercados y dinero y con ello menguaban la crisis, vendían manillas y artesanías para recaudar dinero. Cuenta que desde que está el Dr. Fernando Céspedes en la gerencia de la entidad, han tenido tiempos de tranquilidad y estabilidad, nunca más hubo retraso en sus pagos y con el apoyo de la Dra. Luz Stella, han visto como sus derechos laborales se les han respetado.
Hay algo que doña Nubia ama, y es viajar, con su propio dinero ha financiado viajes a Cartagena, San Andrés y Panamá, anhela pensionarse para poder disponer de más tiempo para seguir conociendo diferentes lugares, especialmente, poder visitar a una de sus hijas en Estados Unidos, dice que no se quiere ir a vivir allá, solo espera estar unos días, pasear y poder regresar para compartir más tiempo con sus otros hijos (dos) y sus nietos.
Oficina de Comunicaciones.
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